Los contratos de trabajo son muy importantes dentro de una organización. Estos establecen las condiciones y términos en los que un empleado trabajará, estableciendo las expectativas y las obligaciones de cada parte y proporcionando un marco legal para la relación laboral. Además, los contratos pueden ser útiles para establecer una política de trabajo clara y coherente y para asegurar que el empleado tenga un entendimiento claro de sus derechos y responsabilidades.
Las modalidades de contratación son diversas y pueden variar dependiendo del país en el que la empresa y el trabajador se sitúen. Tener en cuenta cuáles son los diferentes contratos de trabajo es fundamental para evitar problemas al realizarlos. En este artículo podrás conocer qué tipos de contratos de trabajo existen en Argentina.
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Contrato a tiempo indeterminado
Contrato a tiempo indeterminado
Esta modalidad contractual no tiene fecha de finalización. De cualquier manera, sí posee un plazo de prueba, que tiene una duración de tres meses. Durante este período, tanto el empleado como el empleador tienen la potestad de dar por terminada la relación laboral de forma unilateral, siempre y cuando se avise con una anticipación de quince días. Es importante aclarar que una empresa no puede contratar a un mismo trabajador por dos períodos de prueba consecutivos.
Las jornadas laborales de este tipo de contratos pueden ser completas (de ocho horas diarias) o parciales (inferior a ocho horas diarias). El contrato de trabajo finaliza con la jubilación o renuncia del trabajador, o el pago de indemnización por despido por parte de la organización.
Contrato a plazo fijo
En el contrato de trabajo se fija explícitamente el tiempo de su duración, sin poder extenderse por más de cinco años. Es importante tener en cuenta que deben existir razones justificadas para establecer este tipo de relación contractual y no un contrato por tiempo indeterminado.
La finalización de la relación laboral puede darse por decisión de una de las dos partes (siempre y cuando exista un aviso previo de al menos un mes) o cuando se cumple el plazo establecido.
Contrato de trabajo de temporada
Este tipo de contrato se utiliza cuando el trabajo se realiza durante una época puntual del año, debido a que la demanda de dicho trabajo aumenta en un período determinado del año.
El empleado solo recibe la remuneración durante el periodo de actividad. Debe ser convocado por la empresa empleadora al menos 30 días antes del inicio de la temporada y aceptar la propuesta en un máximo de 5 días.
Contrato de trabajo eventual
Se establece un plazo de duración pero, a diferencia del contrato a plazo fijo, no se sabe con exactitud cuándo va a terminar. Este depende del tiempo por el cual se extienda la obra o la tarea para la cual se contrató al empleado. De cualquier manera, la duración no puede ser mayor a seis meses por año.
Esta modalidad contractual suele utilizarse para la realización de actividades que no son habituales en una empresa, ya sea por el tipo de actividad, la cantidad de personas necesarias para llevarla a cabo o el nivel de calidad que el trabajo implica.
Contrato de teletrabajo
Desde hace un tiempo, el teletrabajo se ha regularizado en Argentina. La pandemia ha popularizado esta modalidad y las ofertas de empleo en teletrabajo han aumentado.
El contrato por teletrabajo se aplica cuando la prestación de los servicios del trabajador es realizada de forma total o parcial en el domicilio del empleado o en algún otro lugar que no sea la empresa para la cual se encuentra trabajando.
Contrato de trabajo de grupo o por equipo
Este tipo de contrato se aplica cuando la relación laboral es establecida entre un empleador y un grupo de trabajadores. Los integrantes del grupo nombran un delegado o representante, que será el que elige a los integrantes del grupo y acuerda la remuneración con el empleador.
Como se puede apreciar, las modalidades de trabajo existentes son diversas. Es importante conocer con claridad todas las posibilidades, para poder contar con más información a la hora de elegir qué tipo de contrato se adapta mejor a las necesidades de la empresa.
